El proyecto incorpora medidas de mejora del comportamiento medioambiental, alineadas con las estrategias propuestas por el esquema de evaluación y certificación LEED®.

 

El sistema de clasificación de edificios sostenibles LEED® es un sistema estándar internacional voluntario, basado en el consenso y en criterios de mercado para desarrollar edificios sostenibles de alta eficiencia. La estrategia de diseño está enfocada a la eventual obtención de la certificación LEED for New Construction (NC), referencial adecuado para la evaluación de las fases de diseño y construcción de un edificio de nueva planta con las mejoras prácticas en términos de sostenibilidad y mínima huella ambiental.

El esquema LEED evalúa los siguientes aspectos:

  • Sostenibilidad de la parcela en que se ubica en inmueble
  • Eficiencia en el uso y gestión del agua
  • Optimización del rendimiento energético y mínimas emisiones
  • Materiales y gestión de residuos
  • Calidad del ambiente interior
  • Créditos adicionales por innovación en el diseño y prioridad regional

Una vez confirmada la viabilidad del proceso y establecidos los objetivos para el diseño se está procediendo con el proceso formal de certificación, para lo cual todos los participantes en el proyecto alinean sus objetivos y el enfoque con la certificación LEED mediante una comunicación fluida y amplia entre las diferentes partes involucradas.

El equipo de diseño realizó un estudio preliminar de viabilidad del proyecto para analizar el potencial de certificación LEED NC. En función de los resultados obtenidos, se ha propuesto la estrategia más adecuada a seguir durante el proceso de diseño y ejecución para optimizar el resultado. De esta manera, VERSONS ha podido establecer desde el principio el objetivo de clasificación y conocer qué implicaciones tendría para el proyecto, con objeto de optimizar los recursos dedicados al proceso y minimizar los costes de ejecución para conseguir las certificaciones seleccionadas en cada caso. Una vez confirmada la viabilidad del proceso y establecidos los objetivos para el diseño se está procediendo con el proceso formal de certificación, para lo cual todos los participantes en el proyecto alinean sus objetivos y el enfoque con la certificación LEED mediante una comunicación fluida y amplia entre las diferentes partes involucradas.

Para el fomento de la movilidad sostenible, el proyecto incorpora información para los usuarios relativa a las líneas de autobús y cercanías que se encuentran próximas al desarrollo. En el diseño de los accesos se tienen en cuenta criterios que garantizan la seguridad de los ciclistas, previendo espacio suficiente para maniobras, minimizando cruces con los accesos de vehículos y empleo de señalética adecuada de forma que se facilita una movilidad segura para peatones y vehículos con o sin motor. Se toman medidas para el fomento de la accesibilidad universal en proyecto garantizando el libre acceso mediante itinerarios accesibles a personas con movilidad reducida a todos los espacios de uso habitual, tanto en el interior como el exterior del edificio. Finalmente, con objeto de fomentar el transporte sostenible, el proyecto incorpora puntos de recarga para vehículos eléctricos en número adecuado para la ocupación.

Se ha desarrollado un estudio específico de la parcela para asegurar que se trata de un terreno no vulnerable , facilitando la integración y el acceso a los servicios próximos. El progreso de las obras sigue un plan de control de la erosión y sedimentación que garantiza el mínimo impacto en los límites de emplazamiento, evitando la contaminación ambiental, acústica y de las infraestructuras. El tratamiento de la parcela y las amplias zonas exteriores existentes tiene una gran relevancia en la mejora de la sostenibilidad del proyecto, orientándolas a la accesibilidad y el confort los usuarios del edificio, así como al desarrollo de eventos lúdicos de mínimo impacto. Se diseñarán las zonas verdes con el objetivo de dotar a los usuarios del edificio de conexión con la naturaleza y se empleará la vegetación para producir sombras en los espacios exteriores de mayor uso. Además, con el objetivo de fomentar la generación de hábitats adecuados para la fauna local, la superficie ajardinada esta ocupada por plantas autóctonas o adaptadas al clima local, lo que contribuye por otro lado a la disminución de las necesidades de riego. Se pone especial cuidado en el diseño paisajístico para evitar introducir especies invasoras, siguiendo para ello el catálogo del Ministerio del Medio Ambiente. Otra medida ha sido la implantación de un sistema de recogida de aguas pluviales que reducirá la escorrentía y permitirá su reutilización en el edificio para riego y arrastre en aparatos sanitarios. Por otra parte, la reducción conseguida del efecto isla de calor conlleva mejoras en la eficiencia energética, mejora de confort en los espacios exteriores en verano y la disminución de los efectos negativos de las olas de calor. Para ello, se ha dado prioridad en el diseño a la incorporación de cubiertas de alta reflectancia, y superficie permeables y vegetadas en la parcela.

La contaminación lumínica afecta a la fauna local y los ritmos circadianos de los usuarios, además de limitar la posibilidad de disfrutar de la observación del cielo nocturno. Por otra parte, el empleo de energía para iluminar el cielo supone un consumo innecesario que se debe evitar. Por ello, el proyecto incorporará un diseño de iluminación exterior de forma que se minimice el flujo hemisférico superior medio (FHS) de las luminarias de alumbrado exterior, disminuyendo la contaminación lumínica.

Se incorporan medidas en proyecto para el ahorro de agua, centrándose en 3 aspectos: la reducción de consumo de agua en el interior del edificio, reducción del consumo en zonas verdes y el empleo de agua recuperada en aquellos usos susceptibles de emplear agua no potable. En el interior del edificio se incorporarán sanitarios y griferías de muy bajo consumo, pudiendo alcanzar ahorros del 50% respecto de la línea base de referencia. Y como se indicó anteriormente, se instala un sistema de reutilización de agua regenerada para su utilización en el riego de las zonas verdes. El diseño paisajístico es responsable con elección de especies de bajo requerimiento hídrico y una dotación de riego por goteo con control de presión.

El proyecto incorpora medidas de disminución de la demanda energética más exigentes que los requerimientos normativos, lo que contribuye a reducir el impacto medioambiental del edificio en operación.

El equipo de diseño se apoya en una simulación energética dinámica para definir estrategias pasivas efectivas que disminuyan la demanda energética del edificio. Para alcanzar elevados ahorros energéticos, se han implementado estrategias basadas en los siguientes principios:

  • Aislamiento térmico: El proyecto incorpora aislamiento térmico mejorado con el objetivo de obtener un coeficiente de transmisión térmica (U) reducido en la envolvente opaca
  • Carpinterías de altas prestaciones: Se seleccionan carpinterías y vidrios bajoemisivos de muy baja transmitancia térmica.
  • Ventilación mecánica con recuperación de calor: la instalación de sistemas de ventilación mecánica controlada con recuperador de calor de alta eficiencia garantizará una adecuada calidad del aire y un importante ahorro energético en épocas intermedias.
  • Estanqueidad al aire: Se analizará el comportamiento de la envolvente del edificio minimizando las posibles infiltraciones, buscando soluciones en los detalles constructivos para garantizar la continuidad de la capa estanca de la envolvente.
  • Ausencia de puentes térmicos: Se estudiarán los detalles constructivos de la envolvente térmica resolviendo los encuentros de forma que se minimicen los puentes térmicos. La buena solución de los puentes térmicos repercute en importantes ahorros energéticos, aumento del confort y prevención de posibles patologías de la envolvente.

Además de las medidas mencionadas, se incorporarán otras estrategias dirigidas a disminuir la demanda de refrigeración y calefacción, como son las fachadas optimizadas, los cerramientos de fachada y cubierta de alta reflectancia, adecuado diseño de las protecciones solares pasivas, sistemas de free-cooling, etc.

Como medidas activas, la instalación permite el funcionamiento parcial del sistema de climatización según la compartimentación por zonas para permitir el encendido y apagado diferenciado según las necesidades. Algunos de los criterios que se tienen en cuenta para la zonificación serán la orientación y el uso simultáneo u ocasional de los espacios. De esta forma se optimiza el funcionamiento del sistema redundando en mejora de la eficiencia energética.

Para garantizar que el funcionamiento de las numerosas medidas de diseño incorporadas optimice la eficiencia energética del conjunto y estas operen como estaban previstas, se incorpora un sistema de control y monitorización o BMS. Dicho sistema realiza la medición independiente de los distintos consumos tanto de energía como de agua, así como parámetros de calidad del ambiente interior.

El BMS permite la obtención de información en tiempo real, así como el almacenamiento de datos históricos, lo que permite analizar tendencias, detectar fallos y en definitiva, analizar posibilidades de mejora en la gestión del edificio.

La puesta en servicio de las instalaciones se encomenda a un equipo especializado en el commissioning de grandes instalaciones que garantiza el profundo conocimiento de las exigencias y procedimientos necesarios. La participación de este equipo técnico independiente reportando directamente a VERSONS, asegura las siguientes labores:

  • Revisión del diseño y validación de toda la documentación relacionada con la recepción y puesta en marcha (proyecto de ejecución, procedimientos y protocolos de puesta en marcha de las empresas instaladoras, planificación de tareas)
  • Revisión de los Requerimientos del Propietario (OPR), de las Bases de Diseño (BOD) y de los documentos de diseño, durante la ejecución de la obra
  • Establecimiento del plan de puesta en servicio su actualización a lo largo del desarrollo del proyecto (plan estratégico de puesta en marcha)
  • Auditoria y supervisión de la preparación de los trabajos previos a las operaciones de puesta en marcha, tales como inspecciones de montaje, validación de los recursos, procedimientos y planificación de las tareas
  • Revisión, validación y presentación de los resultados obtenidos en las pruebas pre-funcionales y de puesta en marcha, que serán realizadas y documentadas por los contratistas y verificadas in situ por el control de calidad
  • Auditoria de los Manuales de Operación y Mantenimiento y elaboración de una guía de Utilización (System Manual)
  • Validación del Plan de Formación del personal técnico de explotación del edificio
 
  • Materiales con declaración ambiental de producto según ISO 14025 (DAP tipo III). Las DAPs o ecoetiquetas tipo III son un documento de transparencia en los que los fabricantes publican los impactos asociados a la vida útil de sus productos, valorados mediante un Análisis de Ciclo de Vida.
  • Productos de madera con certificación de origen sostenible y cadena de custodia.
  • Materiales con declaración de materias primas que prioricen la reutilización de productos, el contenido reciclado y la extracción y manufactura local
  • Materiales con declaración de inventario de ingredientes (tipo Health Product Declaration, Cradle-to-cradle o similar)
  • Materiales prefabricados que facilitan el proceso de desmontaje y reutilización

Además de la selección de materiales con impacto ambiental reducido, se tendrán en cuenta aspectos relacionados con la protección de la salud de los ocupantes. Para ello, se seleccionarán acabados interiores, pinturas, adhesivos, sellantes, composites y aislamientos de bajas emisiones de compuestos orgánicos volátiles (COVs).

En la fase de obra del edificio se genera un gran volumen de residuos de construcción y demolición. Para garantizar la buena gestión de estos, se desarrolla un Estudio de Gestión de Residuos que, además de cumplir con la normativa vigente, garantiza los siguientes objetivos:

  • Identificación de todos los residuos que serán generados durante la construcción especificando la cantidad, calidad y lugar físico en que estos residuos se generan, incluyendo una aproximación de la cantidad que podrá ser valorizada.
  • Información sobre:
    • Qué materiales deben ser separados en origen (por ejemplo, los peligrosos y los reciclables)
    • Qué materiales no pueden ser reutilizados o reciclados
    • Modo en que los residuos (peligrosos o no peligrosos) deben ser gestionados y sus posibilidades de valorización
  • Justificación de la elección de los materiales mediante el análisis de posibles alternativas buscando la minimización de la generación de residuos, así como la búsqueda de aquel procedimiento de demolición que reduzca al máximo la generación de residuos y garantice la revalorización del mayor porcentaje posible de los mismos
  • Inventario de los circuitos locales para la gestión de materiales reutilizables y reciclables, incluyendo las instalaciones de reciclado de la zona y de qué tipo de materiales se pueden hacer cargo
  • Establecimiento de un objetivo de reutilización o reciclado de, al menos, el 75% de los residuos generados, evitando así su vertido

El EGR ha sido realizado por un profesional cualificado con conocimientos y experiencia en materiales de construcción, sistemas de construcción y técnicas de demolición y tratamiento y procesamiento de residuos, así como del mercado local de reutilización y reciclado de materiales.

Adicionalmente, para posibilitar una correcta gestión de residuos durante la vida útil del edificio y garantizar un elevado porcentaje de reciclaje, es necesario prever los espacios necesarios para la adecuada separación de las distintas fracciones. Para ello, el proyecto incorpora las siguientes medidas:

  • Previsión de espacio para contenedores para papel y cartón, vidrio, envases, orgánica y resto de residuos en cada planta del edificio. Se ubica en una zona accesible a los ocupantes y está debidamente señalizado.
  • Se dota al edificio de un espacio accesible desde el nivel de calle para almacén, adecuado para que acceda tanto el personal de gestión de CHGB como los servicios municipales de recogida
  • En caso de detectar posibles áreas de mejora en la gestión de residuos, se solicitará al ayuntamiento la inclusión de dichas mejoras.

La elección del sitio de un edificio y la gestión de ese sitio durante la construcción, son consideraciones importantes para la sostenibilidad de un proyecto.

La mejora de la calidad del aire interior es una prioridad en el proyecto, ya que repercute directamente en el confort y en la salud de los usuarios del edificio. Por ello, se ha desarrollado un plan de calidad ambiental interior para su implementación durante las obras de construcción, que exige las mejores prácticas en cuanto a protección de los trabajadores, así como de los materiales e instalaciones que se van desarrollando.

Los caudales necesarios de ventilación en las zonas ocupadas se garantizan mediante la instalación de detectores de CO2 conectados al BMS para controlar la velocidad de los ventiladores de impulsión. De esta forma el sistema de ventilación puede adaptarse a las necesidades reales del edificio mejorando la eficiencia energética a la vez que se garantiza una adecuada calidad del aire. Los sensores se instalan en las zonas de actividad principales, priorizando los espacios de alta ocupación y aquellos de uso esporádico.

Inicialmente, los filtros de las unidades de ventilación serán provisionales con eficacia F5, empleándose durante las obras y durante la ejecución de un barrido final del volumen de aire en los espacios para retirar los posibles contaminantes que pudieran quedar. A su finalización, se sustituyen por los definitivos de eficacia mínima F7 que reducen la presencia de partículas en suspensión.

Por otra parte, el fomento de la iluminación natural redunda en ahorros energéticos, pero además mejora la salud y el bienestar de los usuarios, ayudando a regular sus ciclos circadianos. Se realiza una optimización de los huecos y la distribución interior para garantizar el acceso a la iluminación natural de un elevado porcentaje de los espacios de ocupación habitual. La iluminación artificial se ha diseñado con los siguientes criterios de calidad ambiental:

  • Proporcionar control lumínico individual con al menos 3 niveles de intensidad al 90% de los ocupantes
  • Iluminancia inferior a 2500 cd/m2 entre 45º y 90º del nadir
  • Índice de reproducción cromática mínima del 80
  • Luminarias con vida útil superior a 24.000 h
  • Iluminación directa cenital para <25% de la iluminación de ROS
  • Optimización de los umbrales de reflectancia media de las superficies de techos, paredes y suelos

Finalmente, para mejorar el confort acústico se toman medidas para superar las exigencias normativas en los siguientes aspectos:

  • Protección de los recintos protegidos frente al ruido procedente del exterior.
  • Protección de los recintos protegidos frente al ruido generado en recintos de instalaciones.
  • Protección de los recintos protegidos frente al ruido generado en recintos no procedentes de la misma unidad funcional de uso.

Equipo asesor LEED de CHGB PARK

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